Santo Domingo.- Por segundo día consecutivo, la esposa e hijos del empresario Antonio Espaillat se presentaron este sábado en la cárcel preventiva del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, donde el propietario de la desaparecida discoteca Jet Set permanece recluido desde el pasado jueves, a la espera de que se le conozca medida de coerción.
Espaillat está acusado, junto a su hermana Maribel Espaillat, de homicidio involuntario tras el colapso del techo del establecimiento nocturno ocurrido el pasado 8 de abril. El trágico suceso dejó un saldo de más de 230 personas fallecidas y al menos 189 heridas, convirtiéndose en uno de los eventos más mortales registrados en locales de entretenimiento en el país.
Las autoridades señalan presuntas negligencias en la estructura del edificio y en los permisos de operación, lo que ha derivado en cargos formales contra los propietarios del lugar. El Ministerio Público ha solicitado prisión preventiva como medida de coerción, alegando riesgo de fuga y gravedad del caso.
Durante la jornada de hoy, los familiares del empresario evitaron ofrecer declaraciones a la prensa, mientras decenas de personas, entre allegados de las víctimas y miembros de la sociedad civil, se congregaron en las afueras del tribunal exigiendo justicia.
