Santo Domingo. – El doctor Bruno Rosario Candelier, director de la Academia Dominicana de la Lengua, criticó la ordenanza del Ministerio de Educación que establece como norma oficial “la ideología del género” en la educación dominicana.
En una nota de prensa, el reconocido escritor dijo que se trata de la orden departamental del Minerd número 33-2019 en la que se impone como prioridad educativa el diseño y la aplicación de la política del género en el Ministerio de Educación.
“Rechazo esa orden departamental del Ministerio de Educación para implantar la política de género en la educación dominicana por el daño que va a producir en la mentalidad de nuestros educandos y en la familia dominicana. Nuestro pueblo ignora la amenaza que entraña la política del doble género para la lengua, la cultura y la moral con las consecuencias negativas para la educación”, enfatizó.
La política del doble género, según Rosario Candelier, no va a revertir el desastre de la educación dominicana, sino a empeorarlo.
El educador comentó que la República Dominicana ocupa el último lugar en América en materia educativa, de cuyo hecho se infiere una lamentable conclusión: “La educación dominicana ha fracasado y, ahora con la política del doble género, seguirá despeñándose hacia el derriscadero del fracaso”.
Subrayó el académico de la lengua que es una torpeza educativa imponer, enseñar y usar el lenguaje del doble género, expresado en el empleo de “los y las”, “todos y todas” y otras redundancias expresivas que “son ridículas, antigramaticales, antieconómicas y antiestéticas”.
Al respecto señaló el escritor mocano que los pésimos resultados en la evaluación de los educandos dominicanos indican el bajo nivel de formación escolar de los bachilleres y licenciados, pues la mayoría de los graduandos “tienen un título inorgánico en términos educativos por la deficiencia en su formación intelectual, moral, estética y espiritual”.
En su declaración, el director de la ADL significó que apoyar la lucha por la igualdad de la mujer no conlleva secundar y promover una nefasta medida administrativa que irá en detrimento de la lengua, la cultura y el desarrollo de la conciencia.
Al respecto enfatizó que es una vergüenza que el Ministerio de Educación esté promoviendo la política del doble género, en vez de promover la conciencia de lengua, la conciencia moral y la conciencia espiritual, como es su obligación.
Dijo que cuando los maestros usan y enseñan el lenguaje del doble género están promoviendo una aberración de la expresión porque viola la normativa gramatical e inficiona el uso del buen decir.