Santo Domingo.- Expertos revelaron según investigaciones que la encorvadura de la columna vertebral en la mayoría de las personas con escoliosis es tan pequeña que no se nota y por eso quien la padece no se practica un chequeo médico, pero esta malformación es más común de lo que se podría pensar, según explicó el doctor Carlos Rodríguez Estévez, cirujano de columna.
El doctor explicó que cuando el paciente tiene una desviación que no está muy pronunciada, sólo se mantiene bajo observación del especialista para dar seguimiento al avance de la enfermedad. Sin embargo, hay unos números que ameritan mayor atención.
“Si la desviación está entre los 15 y 20 grados, sólo se mantiene en observación. A partir de los 20 grados empieza a notarse la curvatura y el paciente va a consulta. Si esta sobrepasa los 20 grados, se utiliza un corsé. Cuando tenemos 40 grados es obligatorio una cirugía”, dijo.
De acuerdo con el experto en cirugía, luego de los 30 grados de desviación, el corsé no funciona. Sin embargo, permite que el paciente no empeore mientras se planifica la fecha de la intervención quirúrgica, en caso de que no sea recomendable en ese momento.
Resaltó que a pesar de que la escoliosis idiopática, la que ven con más frecuencia, no duele; cuando curvatura sobrepasa los 40 grados produce alteración pulmonar, cardiaca y afecta el crecimiento de los órganos internos, porque no le deja suficiente espacio.
