Santo Domingo.- El Ministerio de Salud y Asistencia Social (MISPAS) creó una aplicación para teléfonos celulares mediante la cual los ciudadanos podrán denunciar de manera anónima la venta de medicamentos, productos sanitarios y alimentos falsificados o adulterados que pongan en riesgo la salud.
El usuario solamente tiene que descargar la aplicación DigemApps en Google Store y proceder a tomar una fotografía del producto, poner el nombre del establecimiento donde se está comercializando y especificar si el producto está vencido, si no tiene número de lote, no tiene registro sanitario o su etiqueta no está en idioma español.
A seguidas se generará un número de reporte con el cual las autoridades de la Dirección General de Medicamentos, Alimentos y Productos Sanitarios (Digemaps) procederán a realizar una inspección al referido establecimiento e imponer las sanciones correspondientes.
Durante el lanzamiento de la herramienta tecnológica, la ministra de Salud, Altagracia Guzmán Marcelino, dijo que la ciudadanía hará efectivo su deber y derecho de contribuir a la evaluación y control del sistema de salud, y con ello disminuir los riesgos asociados al consumo de productos adulterados.
Afirmó que la iniciativa forma parte del programa República Digital que ejecuta el Gobierno y contribuirá a la aplicación de la nueva ley de Lavado de Activos que tipifica la falsificación y adulteración como infracción que conlleva penas de 10 a 20 años de prisión, multas de hasta 400 salarios mínimos, decomiso de bienes y la inhabilitación de hasta 10 años.
Guzmán Marcelino sostuvo que la lucha contra productos falsificados, vencidos o retirados del mercado, requiere del respaldo de todos los actores del sistema pues se trata de un flagelo que incide de manera grave en la salud de la población y constituye un delito ligado al crimen organizado.
Según la Organización Mundial de Aduanas, el 10% del mercado mundial de medicamentos está pirateado y en países en vías de desarrollo puede ascender hasta un 20%, por factores ligados a la pobreza extrema, débiles controles de las autoridades, entre otras causas. También la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte sobre la gravedad del problema.
