Santiago de Chile.- Autoridades y expertos dieron a conocer los primeros resultados de una investigación sobre la falla geológica San Ramón, que se extiende de norte a sur en el área oriental de Santiago de Chile y tiene la capacidad de generar sismos de gran magnitud en el área, según los responsables.
La falla, situada entre los ríos Mapocho, que cruza Santiago, y Maipo, a unos 25 kilómetros al sur de la capital chilena, va desde la superficie hasta una profundidad de entre 10 y 12 kilómetros y cruza siete municipios, en los que viven unos dos millones de personas: Lo Barnechea, Vitacura, Las Condes, La Reina, Peñalolén, La Florida y Puente Alto.
El proyecto de investigación incluyó la instalación de estaciones sismológicas permanentes y de GPS temporales que durante el primer semestre de este año detectaron numerosos sismos de entre dos y tres grados Richter de magnitud. También se realizaron dos sondajes que atravesaron la falla para conocer la composición de las rocas. Los datos ayudarán a precisar la ubicación, recorrido y temporalidad de la activación sísmica de la falla, según Gabriel Vargas, académico del Departamento de Geología de la Universidad de Chile y jefe del proyecto.
La falla produce terremotos de alta magnitud cada ciertos milenios, distintos a los que generan los choques de las placas de Nazca y Suramericana, causantes de los terremotos que se producen en Chile, considerado uno de los países más sísmicos del planeta, dijo Vargas.
«Lo importante es que es una sismicidad que tenemos que profundizar y entender mucho mejor, pero es una sismicidad localizada en torno a un objeto tectónico que puede generar sus propios terremotos», explicó a radio Cooperativa. «Consideramos que constituye efectivamente una amenaza seria, que necesita ser abordada de esa manera, con conocimiento científico profundo», subrayó.
Matizó que «la evidencia nos dice que la falla San Ramón ha generado terremotos en la antigüedad, pero como se mueve tan lento no queremos alertar a la ciudadanía». En tanto, el director de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Ricardo Toro, dijo que se están realizando reuniones mensuales de coordinación con las autoridades de los municipios que se verían más afectados por un eventual terremoto.
«Del mismo modo, se han actualizado los planes de emergencia para saber qué hacer, especialmente en las comunas que tienen una gran cantidad de población», dijo Toro, que añadió que la Onemi ha preparado a instructores de equipos comunitarios para que sepan qué hacer y liderar las primeras horas de un eventual sismo.
Los expertos llamaron a la gente a informarse en los organismos oficiales y no atender los vaticinios catastrofistas que se difunden en las redes sociales y algunos canales de televisión.
Sergio Barrientos, director del Centro Sismológico Nacional, remarcó al respecto que aún con los avances tecnológicos actuales, «no hay manera de predecir un terremoto». Los expertos, en todo caso, llamaron a los municipios a evaluar sus planos reguladores urbanísticos, de modo de evitar que se sigan construyendo viviendas sobre la falla de San Ramón.